La fama tiene estas cosas y Justin Bieber todavía no aprendió a lidiar con ellas. El cantante canadiense comentó durante una conferencia de prensa en Singapur que siente temor de sus fans porque las mismas se enloquecen y ponen en peligro su salud.
"Amo a mis fans, pero simplemente me ponen en situaciones peligrosas. A veces, las chicas se ponen muy locas y quieren agarrarme", comentó el cantante adolescente.
Bieber explotó hace unos años y desde ese momento no ha parado de crecer. Millones de discos vendidos, el furor en las redes sociales y el calor de las jóvenes, fueron moneda corriente en este último tiempo. Pero no todo es color de rosa para el canadiense que empieza a conocer la parte mala de ser famoso.
Cuando llegó a Singapur, Justin no saludó a sus fans. Cuando le preguntaron por esa actitud, que hasta ahora se le desconocía, el joven se justificó diciendo que "fue un problema de seguridad. No habría sido seguro para mí. Los gritos y esas cosas, aún no me he acostumbrado a eso. Todavía es una locura para mí".
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